Las nuevas políticas están poniendo en su sitio a los privilegiados.

El pueblo oprimido por los privilegiados Llevamos unos cuantos años, especialmente los últimos meses, en los que cuando entablamos una conversación, inevitablemente, estemos hablando con conocidos o desconocidos, acabamos hablando de la crisis. En la mayor parte de las conversaciones se acaba hablando de aquellos grupos sociales que son unos privilegiados en la situación actual. No está mal. Lo cierto es que en nuestra cultura occidental eso de los privilegios nos parece muy mal desde lo de la Revolución francesa. Hay que acabar con los privilegios y los privilegiados. En general en las conversaciones de café, autobús o callejeras se dispara en todas las direcciones: los funcionarios ( privilegiados por tener empleo fijo y encima los moscosos), los maestros (esos encima tienen más vacaciones), los jubilados (que tenían las medicinas gratis y no hacen más que ir al médico sin necesidad elevando el coste de la sanidad), los parados (que cobran sin buscar trabajo o incluso t...