Mar de amor. Un año sin José Antonio Labordeta.



"Cuando vuelvas de camino
acuérdate de mí: 
solitario, viejo y triste
como la nieve de abril"
(Del poema Nieve en abril)



Mar de amor es el título de una cuidada antología publicada por la siempre singular editorial Olifante (http://www.olifante.es/index.php), que lleva años publicando poesía en Aragón. Pero es que además ha domiciliado su sede nada menos que en Tarazona.  Una valiente decisión. Dura tarea la de publicar poesía desde una tierra esquinada de los centros de decisión de la cultura española.

La edición es de Antón Castro(enlace a su blog) http://antoncastro.blogia.com/ y recoge el texto de algunas de las canciones más conocidas de José Antonio Labordeta. Fue publicado el 25 de julio de 2010 cuando el autor cumple 75 años, a pocos meses de su fallecimiento.

El próximo 19 de septiembre se cumple el primer aniversario de su fallecimiento y parece un momento oportuno para dedicar una primera entrada a la poesía en este blog.

Labordeta (enlace al que fue su blog http://labordeta.zaragozame.com/) forma parte de la banda sonora original de mi vida y supongo que de la de muchos de los y las que seguís este blog.  Sus canciones han acompañado no pocos momentos emocionales de las vidas personales y colectivas de muchos conciudadanos.

Leer los textos de sus canciones sin música descubre un Labordeta algo distinto. Al escuchar y cantar los cantos que nos regalaba se ocultaba, al menos parcialmente, la profundidad de su poesía y la belleza de sus versos

Labordeta ha escrito (musical y poéticamente) la lírica y la épica de la democracia en Aragón.  Ha escrito el relato de la entrada de la Modernidad en nuestra tierra que tan renuente se ha manifestado a estas ideas desde los propios tiempos de los sitios de Zaragoza.

Portada del disco con la voz a cuestas.
Grabación de una presentación poético musical.
Pero sobre todo construyó desde su amor a Aragón una mirada ancha y universal en la que cabían todos los seres humanos, algo con lo que nos gusta identificarnos  a  las gentes de esta tierra. Tal vez por eso su persona y su personaje han transcendido las barreras ideológicas y sociales recibiendo, al final de su vida, un merecido reconocimiento.

José Antonio fue un intelectual comprometido, de los que, de una u otra manera, abundaban, o al menos destacaban, en medio del erial que eran los años de la dictadura y la primera democracia.

José Antonio fue un intelectual que no se separó de las gentes de su tierra, especialmente las de condición humilde, y seguramente sobre todo las del desolado entorno rural aragonés y aún español. Y que tan bien y con tanta dignidad supo retratar en la serie de tv "Un país en la mochila". Era fiel y leal a las personas más allá de los conceptos. Eso se le notaba y le proporciona un tamaño humano poco habitual en los tiempos que corren.

José Antonio fue un hombre comprometido con las grandes palabras: libertad, igualdad, fraternidad, justicia. Pero lo hizo mojándose y mojándose políticamente, mojándose en la participación política en los partidos tan poco valorada en nuestros días. Entendió que las grandes ideas precisan de mediaciones, de estructuras organizativas del pueblo para ser llevadas adelante. Que no vale quedarse en el quejido y en el lamento que internamente sentía. Ante la desilusión, que a veces sentía y sentimos: compromiso. Quizá por eso convenga recordar sus versos:

"He puesto sobre mi mesa
todas las banderas rotas,
las que nos rompió la vida.
la lluvia y la ventolera
de nuestra dura derrota

Rota permanece aquélla
que levantamos al cielo
pensando que la justicia
crecería como un vuelo
de gaviotas en el mar
y vimos cómo al final
sólo nos quedó el recuerdo
de un mástil desarbolado
y unos jirones de tela
rotos por el vendaval."
(del poema Banderas rotas)


Pero quizá lo más importante para mí de Labordeta es que ese compromiso de partido lo hizo sin sectarismos, entendiendo que en otras fuerzas progresistas distintas a aquellas con las que se fue comprometiendo había personas y pensamientos parecidos al suyo. Que el aliento que les movía era similar con acentos distintos. Su compromiso de partido era una necesidad vivida que no olvidaba que la verdadera lucha era común a muchos otros.    

Queden para finalizar estos versos:

"Regresaré a la casa
la casa de mi padre, 
abriré las ventanas
y que la limpie el aire

Y cuando respirables
resulten las alcobas,
traeré a mis compañeros
para iniciar la obra
de levantar el árbol 
delante de mi puerta
que dé cobijo al aire
y al hombre le de sombra"
(De regresaré a la casa)

Enlaces interesantes:

A una página web con muchos datos del autor elaborada por Antonio Pérez Lasheras.
http://www.10lineas.com/labordeta/ybio.htm

A la entrada en la wikipedia:
http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Antonio_Labordeta

A una página web que recoge sus canciones.
http://www.cancioneros.com/aa/480/0/canciones-de-jose-antonio-labordeta







Comentarios

Entradas populares de este blog

La izquierda necesaria. De Josep Ramoneda

Discurso y relato

Nómadas